EMOCIONES A FLOR DE PIEL...

 Hola amores:

Se palpa en el ambiente un halo de magia, una energía mágica envuelve nuestros días, hay exceso de sentimientos mágicos, hay momentos que nos invade una adrenalina difícil de manejar.

Estamos sumergidos en un mar de emociones, no entendemos que pasa, por momentos flotamos, por momentos nos hundimos.

Nos cuesta diferenciar lo real de lo imaginario, sentimos ese desborde sin formas, ese desborde místico que nos lleva por caminos inciertos, sentimos el miedo a lo desconocido, a esas emociones que nos transportan, que nos atrapa, que no nos deja salir a flote y entonces nos ahogamos en ese tsunami imaginario y los miedos nos invade.

Se que es difícil de manejar, es como estar en una lancha donde el motor se apaga, y quedamos flotando a la deriva, sin poder pisar tierra, sin poder anclarnos.

Es un momento que quizás a quienes no están habituados a tanta emocionalidad, sientan ese agobio producto de el tsunami de emocionalidades presentes.

Es un momento para distendernos de tantas situaciones llenas de tensión vividas, es un momento para disfrutar de nuestros seres queridos, de una buena compañía, de un buen amigo, amiga con largas tertulias de por medio, compartiendo un buen trago, o bien un rico café que perfume el ambiente con su sutil aroma.

Es un momento ideal para compartir largas sobremesas en familia, con amigos, o quizás también disfrutar de nuestra soledad, con una copa en la mano, deleitándonos con una buena música que despeje y calme nuestras ansiedades.

La vida no es solo renegar todo el tiempo, debemos darnos tiempo de disfrutar de maravillosos momentos que calmen nuestro día, solos o en compañía, pero dejar por un instante tanto agobio.

Somos los únicos que podemos regalarnos esos momentos mágicos, despejando nuestra mente y soñar con lo que deseemos alcanzar.

Estamos en un excelente momento para que eso ocurra, no lo desperdicies, que la vida es hoy y que estamos transitando ese día menos que queda para el resto de nuestras vidas.

Cariños Amelie!!!

LA RIQUEZA MAS GRANDE...

 Hola amores:

Entre los sueños perdidos y los deseos del alma, siento que la vida corre por fastuosos caminos, me dejo llevar por la magia escondida en las entrañas. 

Siento ese deseo irrefrenable de correr tras los mares, sumergirme en su oleaje, mecerme en su regazo.  Adentrarme en esas aguas buscando en sus entrañas esos tesoros ocultos, esos seres fastuosos marinos, personajes desconocidos, al menos para mi, y que me cuenten sus historias, que me relaten sus fantasías, esos secretos ocultos que mi inquieta curiosidad transita. Poder nadar junto a ellos, poder sentir ese andar libre por sus aguas, aleteando, avanzando por la gran inmensidad marina, sintiéndome una sirena en un cuento de Hans Christian Andersen.

Siento ese deseo infinito de volar por ese cielo maravilloso que deslumbra mis sentidos, mecerme en cada nube que se interponga en mi camino y allí en lo alto, esperar que en el ocaso titilen las estrellas y así encontrar el camino que me alce hacía la luna, fundiéndome en un abrazo de amor y de locura. 

Y al despertar sintiendo la alborada, donde los rayos del sol cosquilleen el alma.   

Sobrevolar planeando, tomando el aire despeinando mis locuras y en ese vuelo ver desde lo alto esos desiertos áridos con sus mágicos oasis, que transportan a ese mundo imaginario de ladrones, odaliscas y misterios...  

Descubrir allí a lo alto la espesura de sus valles, de los tupidos bosque alzándose en el cielo flameando sus copas en una danza de suaves melodías.  

Ver desde lo alto el límites de montañas majestuosas, de alturas infinitas, con lagunas escondidas en sus entrañas...  

Hamacarme en los lazos que cuelgan en la espesura, mecerme mientras los sonidos de tanta magia acurrucan mis sentires.

Encadenarme a cada gota de lluvia y así poder danzar junto a ellas dando vida a la tierra, floreciendo a la vida.  

Aferrarme a esas nubes a punto de estallar y sentir la vibración del trueno rimbombante penetrando mi sombría realidad.  

Deseo trepar esa cúspide infinita y al llegar a su cima abrir mis brazos para que el universo se plasme en mi, sentir los rayos de sol abrazando mi cuerpo y en ese abrazo, el universo entero sembrando luz de energía.  

Allí tan arriba de la tierra, ver el vuelo de los grandes titanes del aire que me mecen en sus alas y no despertar jamás, fundirme en ese sueño que me produce libertad, que llena mis pupilas, mi alma, toda mi vida con esos acordes susurrantes que sólo la naturaleza da. 

Y en esa altura infinita, convertirme en invisible y poder penetrar dentro de ellas, viajando hasta las entrañas de la tierra, descubriendo como este universo sabio nos mantiene, nos abriga, nos protege, encontrando el latir de esos suelos que hacen vibrar nuestras vidas.

Los cielos, los mares, las alturas, el aire, el corazón de la tierra, son vivencias que hemos recorrido gracias a "Julio Verne", en sus viajes extraordinarios.

La naturaleza guarda magia por donde la mires, esconde universos desconocidos, regala todo su encanto, nos nutre, nos alimenta, nos llena de energía, nos da el placer de soñarla en sueños empoderados, pues en ella se esconde la magia de la abundancia, de la fortuna, que nos convierte en hacendados de la riqueza mas grande que podemos atesorar. 

Cariños Amelie!!!